- -
- 100%
- +
La principal sugerencia es que se requiere de manera urgente contar con una nueva institucionalidad, que se constituya en una instancia formal de revisión e investigación de los cambios que es prioritario realizar.
El informe es crítico, y entregó importantes sugerencias y áreas de mejoría para el instrumento. La principal es que se requiere de manera urgente contar con una nueva institucionalidad, que se constituya en una instancia formal de revisión e investigación de los cambios que es prioritario realizar. En este tema ya está trabajando el CRUCh, por lo que esperamos implementar esta propuesta en el mes de marzo. Este organismo deberá analizar este informe, revisar el funcionamiento de las pruebas, los estudios de validez, la evaluación de la inclusión y calidad del sistema y la recomendación de incorporar nuevos instrumentos.
Los temas a incluir en este trabajo debieran estar de acuerdo con las propuestas del informe, los que se describen: en la construcción de la prueba se requiere una mayor inclusión geográfica de los equipos técnicos, preocupación por la población con dificultad lectora, selección de los ítems e inclusión de expertos en currículos y profesores experimentados. Hay también sugerencias en la forma de cálculo de la PSU y la estandarización del puntaje NEM. Respecto del puntaje mínimo para recibir beneficios estatales, se recomienda analizar el rendimiento, las tasas de abandono y de graduación de quienes lo han recibido. En relación con los puntajes PSU, se consideró problemático un puntaje iónico en la prueba de Ciencias, por las dificultades de comparar el rendimiento en biología, física y química. Así también, se solicita llevar los estándares de administración del instrumento a nivel internacional y mejorar la información entregada a estudiantes, profesores y universidades.
En cuanto a la validez del instrumento, los resultados demuestran que los puntajes de la PSU predicen el rendimiento de los alumnos en los primeros años de universidad, en un menor nivel que lo publicado internacionalmente. El ranking de notas contribuye a esta predicción y su implementación debe ser perfeccionada. No hay una relación directa entre el propósito de la PSU para seleccionar alumnos y el contenido de la prueba basado en el currículo de educación media. La equivalencia de utilizar el puntaje por dos años fue considerada aceptable. Por otra parte, se plantea el problema de la diferencia de los contenidos de la educación técnico-profesional y la prueba de Ciencias, y se demuestra un leve incremento de los puntajes de los colegios particulares pagados, lo que sumado a la cobertura, ha aumentado la brecha socioeconómica de la prueba.
En resumen, esta evaluación internacional de la PSU ha sido un aporte para determinar las áreas en que hay que trabajar para perfeccionar el instrumento y llevarlo así a los estándares internacionales que amerita nuestro sistema universitario. La nueva institucionalidad es un punto clave, ya que nos va a permitir implementar los cambios sugeridos, realizar la investigación necesaria y avanzar en nuevos instrumentos para contar con un sistema de acceso a las universidades que sea más justo, moderno y técnicamente válido. Los cambios serán graduales, por lo que los estudiantes que egresan este año deben estar tranquilos. Este trabajo conjunto con el ministerio ha dado frutos en beneficio del país. Este es el camino correcto para avanzar en un sistema universitario de mayor calidad y equidad.
Publicado en el diario El Mercurio el 1 de febrero de 2013.
Admisión a las universidades
Tras conocerse el crítico informe de la evaluación internacional de la Prueba de Selección Universitaria (PSU) realizado por la consultora Pearson, el ministro de Educación ha propuesto una nueva forma de gobierno para la admisión universitaria. Es vital que para abordar los cambios, realizar investigación y avanzar en el sistema de admisión a las universidades se actualice la institucionalidad que presenta el sistema al interior del Consejo de Rectores (CRUCh).
El sistema integrado que aplica anualmente el CRUCh reviste la mayor importancia para el país, ya que establece los instrumentos y mecanismos comunes que aseguran un proceso de evaluación objetivo, transparente y dependiente del mérito. La necesidad de enfrentar los desafíos surgidos del informe internacional, la inclusión de nuevos instrumentos (ranking de notas) y la incorporación de nuevas universidades tornan vital avanzar en la profesionalización del sistema.
La propuesta de la UC es formar un Consejo Directivo de la Admisión Universitaria compuesto por rectores del CRUCh, con la participación del Ministerio de Educación y de las universidades privadas participantes del proceso; un Consejo Asesor Nacional, con representantes de la educación secundaria, técnico-profesional, estudiantes y representantes de los diferentes actores involucrados en el proceso de selección, y un Consejo Asesor Internacional, compuesto por destacadas personalidades del área, con el fin de evaluar los cambios al sistema.
La propuesta de la UC es formar un Consejo Directivo de la Admisión Universitaria compuesto por rectores del CRUCh, con la participación del Ministerio de Educación y de las universidades privadas participantes del proceso, que deberá ser definido al interior del CRUCh. Junto con este organismo se debe crear un Consejo Asesor Nacional, con representantes de la educación secundaria, técnico-profesional, estudiantes y representantes de los diferentes actores involucrados en el proceso de selección que sesionen regularmente. También se plantea la existencia de un Consejo Asesor Internacional, compuesto por destacadas personalidades en el área, con el fin de evaluar los cambios al sistema.
El área ejecutiva deberá estar liderada por un director con experiencia en medición y gestión, del que dependerán las Unidades de Aplicación del instrumento, estudios e investigaciones, y del seguimiento de los procesos. Esta dirección debiese mantener una unidad encargada de la información a los postulantes y un área de estudios que realice informes como los que hoy produce el Comité Técnico de la PSU, además de supervisar directamente a la entidad a cargo de la administración de las pruebas (Demre). Así, se establecería una separación entre el diseño y la aplicación de la prueba.
El director ejecutivo deberá dirigir una agenda que incluya las principales tareas del proceso de admisión; es decir, la predicción del desempeño académico de los estudiantes, funcionamiento de las pruebas, estudios de validez y predicción, evaluación de la inclusión y equidad del sistema, entre otros. Los fondos involucrados en estos cambios pueden estar considerados en el actual valor de la PSU.
Este nuevo Consejo Directivo conducirá el análisis de este informe, especialmente en lo referido a la evaluación de los procesos de construcción de las pruebas y el estudio de la validez del instrumento. Es urgente abordar este año los cambios en los contenidos de la prueba de Ciencias para los estudiantes de la educación técnico-profesional y revisar la fórmula del cálculo del ranking de notas.
El Consejo de Rectores definirá el nuevo organismo que garantice a todos los estudiantes y sus familias un sistema nacional de admisión a las universidades moderno, de nivel internacional, justo y técnicamente válido.
Publicado en el diario La Tercera el 24 de marzo de 2013.
Estudiantes con necesidades educativas especiales
Una universidad es más inclusiva en la medida en que se hace cargo de la diversidad de sus estudiantes, de manera de asegurar el aprendizaje de todos. Un sistema inclusivo no considera a la diversidad como un problema, sino como un desafío y una realidad que enriquece el proceso enseñanza-aprendizaje.
En Chile, de acuerdo con las cifras disponibles, solo el 7% de los jóvenes con algún tipo de discapacidad accede a la universidad y el porcentaje es aun menor cuando se revisan las tasas de titulación. Existen aspectos específicos que dificultan la inclusión en la forma de barreras tangibles, del tipo de infraestructura, pedagógicas, comunicacionales y de acogida de la comunidad. En su conjunto, estas limitaciones obstaculizan el ingreso y, de manera especial, la progresión académica de los estudiantes.
Nuestra universidad dispone de un sistema establecido de admisión especial para el ingreso de estudiantes con discapacidad y necesidades especiales. Sin embargo, solo desde hace cinco años existe un programa que favorece la inclusión y otorga igualdad de oportunidades para estos alumnos. El Programa para la Inclusión de Alumnos con Necesidades Especiales –Piane UC– promueve la inclusión de nuestros estudiantes con discapacidad. Además, otorga condiciones de equidad e igualdad de oportunidades a quienes presentan necesidades educativas especiales asociadas a discapacidad sensorial o motora, en todos los ámbitos del quehacer académico y de la vida estudiantil, con el propósito de generar una cultura inclusiva en la comunidad UC.
El Programa para la Inclusión de Alumnos con Necesidades Especiales –Piane UC– promueve la inclusión de nuestros estudiantes con discapacidad. Además, otorga condiciones de equidad e igualdad de oportunidades a quienes presentan necesidades educativas especiales asociadas a discapacidad sensorial o motora, en todos los ámbitos del quehacer académico y de la vida estudiantil, con el propósito de generar una cultura inclusiva en la comunidad UC.
Los ámbitos de acción comprenden: a) apoyo a los alumnos con discapacidad en aspectos académicos y tecnológicos, b) asesoría a los docentes en las adaptaciones en los contenidos y evaluaciones, c) capacitación en el uso de recursos tecnológicos especializados, d) información y sensibilización de la comunidad, y d) investigación en el área de la inclusión. Además, de manera periódica se informa a todos los docentes de la presencia de alumnos con discapacidad, señalando los cambios metodológicos requeridos.
Recientemente se ha establecido un convenio de colaboración con el Centro de Desarrollo de Tecnologías de Inclusión–Cedeti–, donde los alumnos participantes del programa y los profesionales reciben asesoría acerca del uso y actualización en tecnologías de la inclusión. Esto implica un importante desarrollo de la investigación en esta área. Actualmente hay más de 50 alumnos de 18 carreras con discapacidad en la UC, de los cuales 30 han participado de las actividades del Piane UC.
Para desarrollar un análisis global, es importante identificar líneas de acción comunes, que incluyen la difusión y capacitación a los miembros de la comunidad universitaria, poder gestionar recursos para la adecuación de la infraestructura, estructurar una oferta extracurricular que garantice el acceso de los estudiantes discapacitados, disponer de recursos tecnológicos específicos de acuerdo con el tipo de discapacidad e implementar un programa de egreso de la universidad e ingreso y seguimiento en la vida laboral. En este sentido, la relación con los empleadores es clave.
El gran desafío de las universidades consiste en responder con eficiencia a las necesidades educativas que se derivan de la heterogeneidad de sus estudiantes. Para avanzar en inclusión y equidad, las universidades deben tener políticas, estrategias, procesos y programas que permitan implementar estos desafíos. Los programas de inclusión desarrollados al interior de las universidades cumplen la función fundamental de disminuir los obstáculos y favorecer la equidad, de modo que los estudiantes con necesidades especiales tengan la oportunidad de ingresar, permanecer y egresar de la educación superior en igualdad de condiciones respecto de sus pares. El aporte y la riqueza humana e intelectual de estos alumnos se verán reflejados en una sociedad desarrollada y más integrada.
Publicado en el diario La Segunda el 4 de julio de 2013.
Beneficios del ranking de notas en la universidad
El departamento de Evaluación y Registro Educacional (Demre) publicó el informe “Efecto de la incorporación del ranking de notas en la selección universitaria” (Larroucau, Ríos y Mizala), que concluye que el ranking de notas genera un impacto positivo en la selección de estudiantes a las universidades, ya que beneficia a alumnos de mejor desempeño escolar, de menor nivel socioeconómico, a los pertenecientes a establecimientos municipales y subvencionados, y a las mujeres. Este impacto se acentúa al restar ponderación a la PSU en vez de a las notas de enseñanza media.
En la UC hemos sostenido que el ranking de notas es un paso en la inclusión, al avanzar en la equidad del acceso en un proceso marcado por el impacto de la PSU. De esta manera, apunta a premiar el esfuerzo y el talento de los estudiantes en su propio entorno educacional. Así, el ranking es un indicador que no tiene brecha social. Estas conclusiones coinciden con nuestro estudio previo (Gil, Paredes, Sánchez: El ranking de las notas: inclusión con excelencia), lo que confirma que vamos en el camino correcto.
La valoración del desempeño escolar en la forma en que lo hace el ranking de notas instala en las salas de clases un incentivo por el cual estudiar, lo que impacta sobre la calidad de la educación media. Además, la incorporación a las universidades de estudiantes con una destacada motivación, gusto y facilidad por el estudio, sumado a buenos hábitos de lectura, mejorará las tasas y los tiempos de titulación. Sumado a lo anterior, la incorporación de estudiantes de origen social y étnico diverso será un aporte a la cohesión social.
La valoración del desempeño escolar en la forma en que lo hace el ranking de notas instala en las salas de clases un incentivo por el cual estudiar, lo que impacta sobre la calidad de la educación media.
Hemos realizado un seguimiento del rendimiento académico de nuestros estudiantes durante los últimos años, encontrando un significativo mejor promedio de notas en las diferentes carreras de la universidad de los alumnos que están en el 10% superior de sus promociones de colegio. Esta diferencia reduce e incluso elimina las brechas socioeconómicas que impactan en el rendimiento académico.
Para el próximo año el CRUCh ha introducido cambios en la ponderación del ranking de notas que permiten asegurar que este impacto aumentará. Se ha proyectado un alza en los puntajes de ingreso en varias carreras, lo que es efecto de la valoración del rendimiento escolar en los diferentes entornos educacionales. El desafío incluye desarrollar el apoyo académico que requieren los estudiantes, en especial los más vulnerables. Este apoyo es crucial, debido al desnivel en los conocimientos adquiridos en la educación escolar. Está pendiente incluir el ranking de notas en la asignación de las ayudas estudiantiles, así como también en el Aporte Fiscal Indirecto. Una buena señal es la propuesta del ministerio de elevar las exigencias mínimas para estudiar pedagogía a 550 puntos PSU, o tener un ranking de notas en el 15% superior del establecimiento educacional, lo que valora el rendimiento escolar.
El ranking de notas es un avance en equidad y calidad en la admisión universitaria. Lograr una universidad de calidad depende de los profesores y estudiantes que forman parte de ella. Si los estudiantes son los mejores y provienen de diferentes realidades culturales, económicas y geográficas, el proyecto educativo gana también en pluralismo y calidad.
Publicado en el diario La Tercera el 9 de septiembre de 2013.
Integración de los estudiantes con necesidades educativas especiales
Recientemente, el Ministerio de Educación anunció que en el mes de octubre se aplicará la prueba Simce de comprensión lectora y matemática a todos los niños con discapacidad en sexto básico. Se calcula que la rendirán, junto con el resto de los alumnos de ese nivel, cerca de 400 niños con discapacidad auditiva o visual en un número importante de escuelas de todo el país. El objetivo es aplicarla de manera censal a lo largo del país para poder orientar las políticas públicas y los programas de integración más que con el fin de evaluar los resultados individuales.
Una sociedad desarrollada se destaca por el cuidado y preocupación que tiene por sus habitantes con diferentes tipos y grados de discapacidad. Así también, una universidad es más inclusiva y acogedora en la medida en que se hace cargo de la diversidad de sus estudiantes, de manera de asegurar el aprendizaje de todos. De esta manera, no se considera la diversidad como un problema, sino como un desafío y una realidad que enriquece el proceso enseñanza-aprendizaje.
En Chile, solo el 7% de los jóvenes con algún tipo de discapacidad accede a la universidad y un menor número logra la titulación. Existen aspectos específicos que dificultan la inclusión en la forma de barreras tangibles, en las áreas de infraestructura, pedagógicas, comunicacionales y de acogida de la comunidad. Estas limitaciones obstaculizan el ingreso y, de manera especial, la progresión académica de los estudiantes. La publicación del reciente libro “En el camino hacia la Educación Superior inclusiva en Chile” (Lisi, Zuzulich y cols. UC) presenta una actualización de los fundamentos y adecuaciones curriculares para estudiantes con discapacidad sensorial o motora. Así, también, el trabajo en una red universitaria, propiciado por el Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis) con el apoyo ministerial, es una iniciativa que va en la dirección correcta.
Una sociedad desarrollada se destaca por el cuidado y preocupación que tiene por sus habitantes con diferentes tipos y grados de discapacidad. Así también, una universidad es más inclusiva y acogedora en la medida en que se hace cargo de la diversidad de sus estudiantes, de manera de asegurar el aprendizaje de todos.
El Programa para la Inclusión de Alumnos con Necesidades Especiales –Piane UC– se ha ido construyendo a partir de la revisión y recopilación de experiencias de los estudiantes de la universidad y busca promover la inclusión de nuestros alumnos con discapacidad. De esta manera, otorga condiciones de equidad e igualdad de oportunidades a quienes presentan necesidades educativas especiales asociadas a discapacidad sensorial o motora, en todos los ámbitos del quehacer académico y de la vida estudiantil, con el propósito de generar una cultura inclusiva en la comunidad UC. Los ámbitos de acción comprenden el apoyo a los alumnos con discapacidad en aspectos académicos y tecnológicos, la asesoría a los docentes en las adaptaciones en los contenidos y evaluaciones, y también la capacitación en el uso de recursos tecnológicos. Otras actividades relevantes son la información a la comunidad y la investigación en el área de la inclusión. Es así como participan del programa más de 50 alumnos pertenecientes a 18 carreras de la universidad.
Con el fin de implementar estas políticas, es necesario identificar líneas de acción, realizar difusión y capacitación a los miembros de la comunidad universitaria y presupuestar los recursos para adecuar la infraestructura. Es importante además programar la malla extracurricular que garantice el acceso de los estudiantes discapacitados, organizar los recursos humanos y tecnológicos adecuados al tipo de discapacidad e implementar un programa de seguimiento de los egresados y de su inserción en el campo laboral. Es fundamental crear y reforzar una relación de información fluida con los empleadores.
El gran desafío del sistema educacional en todas sus etapas consiste en responder con eficiencia a las necesidades educativas que se derivan de la heterogeneidad de sus estudiantes. Los programas de inclusión de las instituciones de educación superior disminuyen los obstáculos y apoyan a los estudiantes con necesidades especiales para que puedan ingresar, avanzar y egresar de la educación superior con equidad e igualdad de condiciones respecto de sus pares. La preocupación del sistema educacional desde la etapa escolar va a favorecer una mayor presencia y participación de estudiantes con discapacidad en la educación superior, lo que permitirá, sin duda, el desarrollo de una sociedad más justa e integrada.
Publicado en el diario El Mercurio el 21 de septiembre de 2013.
Avances en la PSU
En los próximos días, miles de estudiantes rendirán la Prueba de Selección Universitaria (PSU). Este instrumento ha estado sometido a críticas por reflejar –y profundizar– la brecha socioeconómica del sistema educacional. Al evaluar contenidos, revela la inequidad social de nuestro sistema educativo. El informe internacional de la PSU, realizado por la consultora Pearson, ha guiado los cambios realizados durante este año.
Esta evaluación se enfocó en dos áreas: los procesos de construcción de las pruebas y el estudio de la validez del instrumento. Para avanzar, se implementó una nueva institucionalidad del Sistema de Admisión Universitaria. Los objetivos fueron modernizar la gestión del proceso de admisión, realizar una mejora continua de su implementación, y una mayor calidad y transparencia del sistema. Los cambios incluyeron un directorio constituido por rectores del CRUCh; una dirección ejecutiva a cargo de implementar los estudios, modificaciones y avances en el sistema; y un comité consultivo integrado por profesionales del Ministerio de Educación, de las universidades adscritas al sistema, de la Agencia de Calidad y de la futura superintendencia de educación superior; y como invitados permanentes, representantes de los estudiantes universitarios y secundarios.
El informe internacional de la PSU, realizado por la consultora Pearson, ha guiado los cambios realizados durante este año. Esta evaluación se enfocó en dos áreas: los procesos de construcción de las pruebas y el estudio de la validez del instrumento.
Recientemente se entregó un informe al ministerio con los avances realizados durante este año. Estos incluyen un aumento de preguntas en varias pruebas, la evaluación de una eventual discriminación del instrumento, una prueba adaptada al currículo de Ciencias para los alumnos de los liceos técnico-profesionales y la consideración de dos decimales en las notas de enseñanza media. Se planifican, además, cambios que incluyen: aumento del banco de preguntas, incorporación de los cambios curriculares de la educación media, cursos de capacitación para los profesores que realizan preguntas, una mayor relación entre las pruebas y los contenidos del currículo, la incorporación de profesores de regiones y de nuevas instituciones para tener una mayor diversidad de preguntas. A futuro, se terminará con la eliminación de preguntas buenas en relación con las malas y se construirán perfiles de ingreso de los estudiantes para las diferentes carreras. De acuerdo a lo descrito, los avances se orientan a una mejor construcción y validación de las pruebas, mejor calidad de preguntas, mayor validez en la predicción de selección y aumentar la difusión para dar a conocer los cambios.
Junto a los avances mencionados, se implementó –desde el año pasado– la ponderación del ranking de notas. Este instrumento permite premiar el esfuerzo, dedicación y talento de los estudiantes de los diferentes sectores educacionales, reduciendo la brecha socioeconómica. La metodología a utilizar y ponderación se perfeccionarán en los próximos años. Lo importante es que avancemos en calidad y equidad de la admisión universitaria. El perfeccionamiento de los instrumentos de selección universitaria es un desafío permanente. Nuestro compromiso se orienta a identificar a los jóvenes con mayor talento académico y a poder predecir su adecuada progresión en la educación superior. La sociedad a que aspiramos debe dar igualdad de oportunidades a todos, con valoración del esfuerzo, dedicación y talento académico.
Publicado en el diario La Tercera el 29 de noviembre de 2013.
La verdad del ranking de notas
Esta semana se ha realizado el proceso de matrícula de las universidades adheridas al Sistema Único de Admisión. Los resultados son similares respecto de años anteriores, en el sentido del rendimiento y la preferencia de los estudiantes. Se ratifica la brecha de procedencia educacional y socioeconómica en favor de los estudiantes de mayores ingresos. Por segundo año, el ranking de notas ha tenido una ponderación (variable según cada universidad), por lo que es importante analizar su efecto.






